La danza de la existencia y la claridad del ser
- KAVINDRA SERAPHIS
- 17 mar
- 3 Min. de lectura
La vida se despliega ante nuestros ojos como una corriente incesante de formas, sonidos, pensamientos y emociones. Es un juego que se experimenta en cada instante, una danza que se mueve con su propio ritmo, siguiendo una lógica que parece interna a su manifestación. Aunque en última instancia no es la realidad absoluta, dentro de esta dimensión relativa se expresa con plenitud, permitiendo que la conciencia lo atraviese y lo contemple sin resistencia.
La comprensión de que no somos únicamente este cuerpo, estas emociones ni esta mente inferior, no implica una negación de la experiencia. Por el contrario, cuando la verdad se revela, la vida se vive con mayor intensidad, sin las cadenas del apego ni el peso del temor. No se trata de rechazar el mundo ni de evadirlo, sino de experimentarlo con la lucidez de quien conoce su naturaleza transitoria y, por ello mismo, lo vive sin aferrarse, con la plenitud de quien se entrega completamente al instante sin perderse en él.
En esta manifestación de la existencia, cada acontecimiento surge porque así se expresa en este momento. No hay error en ello, ni razón para la lucha interna que busca escapar de lo que ya es. La huida del mundo solo refuerza la ilusión, porque el rechazo sigue atado a la creencia en su realidad independiente. Lo importante no es huir, sino estar presente con claridad, vivir sin identificarse con lo efímero y, al mismo tiempo, sin negarlo.
Este equilibrio es un arte sutil. No se trata de disolver la ilusión combatiéndola, sino de atravesarla con la conciencia despierta. La negación de la experiencia es solo otra forma de ilusión, pues implica que algo en ella tiene un poder que no posee. En cambio, cuando se fluye con lo que sucede, sin resistencia ni apego, sin afán de controlar ni necesidad de escapar, la verdad subyacente se revela con naturalidad.
Quien comprende esto vive con libertad. No es un espectador pasivo de la existencia, pero tampoco un esclavo de ella. Participa en la danza sin olvidar que es solo un baile, se mueve con el ritmo de la vida sin perder de vista lo que está más allá del movimiento. No busca fijar nada, porque sabe que todo fluye, pero tampoco teme la impermanencia, porque ha reconocido que aquello que realmente es no está sujeto a cambio alguno.
Este estado no es un ideal distante ni una meta futura; es una posibilidad en cada momento. La conciencia, al despertar a su verdadera naturaleza, no se retira del mundo, sino que lo atraviesa con sabiduría. No se aferra ni rechaza, simplemente Es. Y en esa entrega absoluta, paradójicamente, se trasciende el juego sin necesidad de romperlo.
Más allá del tiempo, más allá de las formas, lo real permanece. No hay que buscarlo fuera ni forzarlo a aparecer. Solo hay que vivir plenamente, con la claridad de quien ve y comprende. Cuando la vida se vive así, la danza de la existencia se convierte en la expresión natural de aquello que nunca ha dejado de ser.
Si esta reflexión ha resonado en su interior, le invito a profundizar en “Despertar del Ser Interior | El Camino hacia la Paz y la Iluminación de la Conciencia”, un libro que desvela la naturaleza última de la realidad desde la visión de Kavindra Seraphis. A través de enseñanzas claras y directas, este libro le guiará en la disolución de las ilusiones que ocultan la verdad, mostrándole el camino hacia la comprensión de la existencia como una unidad inseparable con lo divino. Cada página es una puerta abierta a la transformación, un paso más en el sendero hacia el conocimiento profundo de su propia naturaleza.
«Mi libro Despertar del Ser Interior es la llave para acceder a mis enseñanzas y abrir la puerta al verdadero despertar.» KAVINDRA SERAPHIS
DESPERTAR DEL SER INTERIOR: El Camino hacia la Paz y la Iluminación de la Conciencia (DESPERTAR DE LA CONCIENCIA nº 1) (Spanish Edition)
Comentarios